¿Qué hacer en Barcelona este fin de semana? Los 10+1 planes que no puedes perderte

September 10, 2025

¿Cuáles son las visitas imprescindibles en Barcelona? Hoy te traemos los mejores planes para pasar un fin de semana en Barcelona, algunos de ellos gratuitos.

Seamos realistas desde el principio: quien se aburre el finde en Barcelona es porque quiere o porque estamos a fin de mes (que también puede pasar, oye).

Eso es una verdad más grande que la todavía en construcción Sagrada Familia, pues si algo le sobra a la ciudad condal (además de obras en el transporte público), son actividades que hacer. Cultura, gastronomía, música, fiesta… aquí tiene plan hasta el apuntador.

Así que toma buena nota, que te traemos los mejores planes para este fin de semana en Barcelona, y algunos hasta gratis, que siempre viene bien. ¡Al lío!

¿Qué hacer un fin de semana en Barcelona?

1. Visitar el Museu Picasso

Si eres de quienes disfrutan de verdad el arte, el Museu Picasso es una visita obligada para ti. No solo porque alberga una de las colecciones más importantes del pintor malagueño, sino porque te permite ver cómo fue evolucionando desde sus primeros bocetos hasta sus obras más reconocidas.

Además, está en pleno barrio del Born, así que después del recorrido cultural puedes salir a pasear entre calles estrechas, terrazas escondidas y tiendas de “souvenirs” donde comprar otro imán para la nevera o una figurita de porcelana para la mama o la abuela.

2. Pasear por el Mercat de la Boqueria

Si hay un mercado que resume la esencia de Barcelona, ese es el Mercat de la Boqueria, en plena Rambla. Puestos de fruta recién cortada, zumos naturales para refrescarte mientras paseas, embutidos, pescados, dulces… un festín para los más gourmets.

Lo mejor de la Boqueria es que no solo compras productos, también vives una bonita experiencia: charlas con los vendedores, descubres ingredientes nuevos y, si el hambre aprieta, siempre puedes sentarte en alguno de sus bares de mercado y probar tapas más frescas que el pescado madrileño.

3. Subir al Castillo de Montjuïc

Para quienes buscan una mezcla de historia, naturaleza y vistas que quitan el hipo, el Castillo de Montjuïc lo tiene todo. Puedes llegar caminando, en funicular o, para los afortunados que no tienen vértigo, en teleférico con vistas al mar.

Una vez arriba, te esperan jardines preciosos, murallas con más historia que el libro de Petete y una panorámica de la ciudad que ríete tú del “skyline” neoyorquino. Luego, para reponer fuerzas (sobre todo si has subido tirando de pulmón), el siguiente plan.

4. Tapear en la calle Blai (Poble-sec)

La calle Blai, en Poble-sec, es archiconocida por los amantes de las tapas y los pinchos. Aquí el plan no tiene vuelta de hoja: ir de bar en bar, pedir un par de pinchos (a menudo a 1€) y acompañarlos de su cañita o su vermut fresquito.

El ambiente siempre es animado, con locales y gente compartiendo mesas y barras. Un plan económico, divertido y perfecto para empezar la noche a las 5 de la tarde.

5. Relajarse en el Parc de la Ciutadella

Si quieres un plan de finde tranquilo, el Parc de la Ciutadella es tu refugio. Este pulmón verde en el corazón de la ciudad es ideal para un picnic improvisado, leer bajo la sombra de un árbol a lo bohemio o simplemente descansar tirado en la hierba.

En la Ciutadella no te aburrirás, pues los músicos callejeros, malabaristas o grupos de yoga al aire libre seguro que amenizan el momento. Además, puedes aprovechar para visitar el zoo de Barcelona, que está justo a la vera.

6. Darlo todo en Razzmatazz

Junto a la Sala Apolo, la Razzmatazz es una de las salas más míticas de Barcelona. Con sus espacios y estilos musicales distintos, es imposible no encontrar lo que a ti te va: indie, pop, electrónica, hip-hop o reggaetón hasta abajo.

En este templo de la fiesta tocan bandas internacionales y DJs de renombre, pero también hay sesiones temáticas y más underground. Lo normal es salir de Razzmatazz con el sol ya asomando, el momento ideal para tomarte unos churritos con chocolate y a la cama. O lo que empalme después.

7. Pasar el día en la Barceloneta

Antiguo barrio de pescadores, la Barceloneta hoy día se ha convertido en un barrio lleno hasta la bandera, lo mismo que su playa. Si te van las muchedumbres y el poliglotismo, los partiditos de vóley, hacer footing por el paseo marítimo y refrescarte con un bañito en el mar, ya tienes plan para tu finde veraniego en Barcelona.

Y si prefieres algo más tranquilo, solo tienes que caminar un poco hacia las playas de Bogatell o Nova Icaria, donde el riesgo de recibir un balonazo en la oreja es ligeramente inferior.

8. Descubrir el MACBA

En el caso improbable de que el Museu Picasso te haya dejado indiferente, el Museu d’Art Contemporani de Barcelona (MACBA) es otra parada de arte obligatoria. Sus exposiciones de arte contemporáneo siempre sorprenden y te hacen reflexionar sobre dónde venimos, adónde vamos y en qué momento empezó a gustarnos más ir de museos que irnos de discotecas: las preguntas existenciales que todos nos hacemos a partir de los 30.

Pero ojo, que el museo no es lo único interesante. La plaza del MACBA es uno de los puntos de encuentro de skaters, grafiteros y artistas urbanos en general. No hay nada como sentarte allí con unas cervecitas pilladas en el supermercado, descubriendo al que podría ser el próximo Eminem o Drake.

9. Darte una vuelta por El Raval

Ya que estás por el MACBA, aprovecha para dar una buena vuelta por el pintoresco barrio de El Raval.

En solo unas cuantas calles, puedes descubrir cualquier gastronomía del mundo a precios bastante asequibles, conocer a gente de países que no sabías ni que existían y, si tienes buen estómago y mejor hígado, tomarte una absenta al estilo tradicional en el historiquísimo bar Marsella.

Ni caso a los youtubers que visten chaleco de policía y miran a todo el mundo como si le fueran a pedir 1€ para el metro: un barrio que aloja la Filmoteca no puede ser un barrio peligroso. ¿Friki?, ni lo dudes. ¿Peligroso?, ni lo más mínimo.

10. Ver un espectáculo en el Palau de la Música Catalana

Por otra parte, si el “under” no te va mucho y prefieres un plan más elegante y refinado del que presumir en Instagram, el Palau de la Música Catalana es tu sitio.

Se trata de un edificio modernista, obra de Lluís Domènech i Montaner y Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, donde fliparás con solo entrar: vidrieras, mosaicos y una arquitectura espectacular.

Ya si además lo acompañas con un concierto de música clásica, jazz o flamenco (músicas típicamente catalanas donde las haya), el plan quedará bordado.

11. Probar las smash burgers de Hideout Burger

Para rematar tu finde en Barcelona, un plan que hará la boca agua a los foodies más carnívoros, como es probar (y alucinar) con las smash burgers de Hideout. No exageramos al decir que están entre las más famosas de la ciudad: carne jugosita, pan esponjoso y más combinaciones que el Barça de Hansi Flick.

Además, puedes elegir entre sus dos locales, Hideout Poblenou o Hideout Eixample, según dónde te pille el antojo. Un planazo perfecto para coger o reponer fuerzas antes o después de descubrir tooodo lo que Barcelona te ofrece.

Once planes muy distintos pero igual de divertidos. Da igual si eres de ir de tranquis, de quemar la ciudad, de comer hasta reventar, de visitar museos, de playa o de montaña: esta ciudad siempre tiene algo para ti, y sin necesidad de arruinarte.

Así que este fin de semana en Barcelona, tienes plan sí o sí.

¿Con ganas de una smash burger de verdad?
 Pídela o ven a disfrutarla, tú decides.